Limpiar las moras con agua fría y retirar las que estén en mal estado. Batir la clara a nieve.

En un procesador de alimentos o licuadora, combinar las moras, agua, azúcar, jugo de limón y el vino.

Luego de que la mezcla está suave e integrada colocar en un bowl y agregar la clara de huevo batida con movimientos suaves y envolventes hasta que esté bien integrada.

Deje enfriar y lleve a la heladera o al congelador. Si opta por el último, cada treinta minutos, durante las primeras tres horas, remueva la mezcla para que no se solidifique. Retira el helado de vino del congelador unos 15 a 20 minutos antes de servir, para que no esté tan duro y puedas formar las bolas.